¡Una ternurita!
Si buscas un animalito que te acompañe y lo quieres suave y tierno, piensa en un conejo. Son buenos amigos y se acomodan en poco espacio.
Como un peluche
Son suaves, “algodonados”, parecen peluches. Pero no olvides que no son juguetes y necesitarán cariño y cuidados básicos. Debes ponerle un nombre, se acostumbrará al escucharlo y responderá por él.
¿Dónde dormirá?
Ellos necesitan una jaula, será su casa así no anda libre por la casa. Debe tener espacio para moverse y sentirse cómodo. Si lo prefieres libre la jaula puede ser más pequeña. No le puede faltar agua fresca, hierbas para masticar, juguetes de madera y un arenero para sus necesidades.
Los conejos son muy inteligentes, no como en los dibujos animados. Aprenden lo que pueden hacer, lo que no y donde hacer “pis y caca”. Se adaptan rápido a su entorno.
¿Sabías que, los conejos no transmiten enfermedades al ser humano? Son silenciosos, no molestan, son muy cariñosos. Cuida no pisarlos cuando sea pequeño.
Elige bien su raza, algunos son chicos y otros muy grandes para un apartamento. No comen cualquier cosa, son buenas las verduras o alimento balanceado, su aparato digestivo no está apto para comida casera.
¿Sabías que, no debes dejarlos sueltos ni sin control? Roerán todo lo que encuentren, necesitan desgastar sus dientes.