Cuando practicamos deportes ganamos salud y amigos. Pero también aprendemos valores, como el respeto, compañerismo, a aceptar la derrota y a jugar limpio.

Si haces deporte en grupo debes aprender a respetar a tus adversarios y amigos. Al hacerlo, serás ejemplo ante los otros chicos.

Juega limpio

El éxito pierde su valor si no se logra con honestidad y justicia. Quizá puedas engañarlos, pero tú no estarás satisfecho por vencer así, no tendrías méritos reales.

Diego Armando Maradona hizo un gol con la mano contra Inglaterra en el Mundial de Fútbol de 1986. El juez no lo vio y el juego finalizó con la victoria de los argentinos por 2 goles a 1. Eso hoy no es una gracia sino una vergüenza y es un claro ejemplo de lo que no es jugar limpio.

El juego limpio te recompensará, aunque el tanteador no marque a tu favor. Porque si tu juego es justo y sano, ganas respeto de los demás. Sin embargo, el que engaña no siempre llega lejos.

¿Sabías que, si todos jugamos limpio también ayudará a alejar la violencia en el deporte? Y lo principal es que a ser honesto se aprende desde muy chico y cuanto antes lo sepas, mejor será para ti.

Ganar o perder

A veces ganamos y otras perdemos, porque no hicimos las cosas tan bien o porque no nos ayudó la suerte. Eso pasa en todo lo que hacemos y en el deporte, también. Si nos toca perder mantengamos el ánimo, porque seguramente si nos esforzamos, en la siguiente ganaremos.

¿Recuerdas la final del Mundial de Rusia? Nadie dudaba que Croacia quería ganar, era su primer Mundial y tuvo buen desempeño en todas las etapas. Sin embargo, ganó Francia.

¿Sabías que, en ese partido hubo muchos ejemplos de buenos valores? Terminaron y el equipo de Croacia saludó a su contrincante, se dieron la mano y se abrazaron. Al recibir su medalla de plata avanzaron entre aplausos y felicitaciones de franceses y las hinchadas.

Si perdimos, felicitemos al ganador y trabajemos más y mejor para que la próxima vez nosotros o nuestro equipo sea el que triunfe.

Reglas de juego

Toda regla está para ser cumplida, juegos y deportes las necesitan para guiarnos. Debes entenderlas para superarte y ser mejores. Saber jugar es jugar bien y, sobre todo, es jugar limpio.